Culpar a las condiciones de lluvia constante, temperaturas elevadas, o elevada humedad en el ambiente, de una invasión de moho es ver el problema de forma parcial. Las prendas de vestir de cuero y piel, las prendas enceradas tipo barbour, belstaff, y similares han de recibir cuidados especiales, y un almacenamiento apropiado puede ser una magnífica barrera para este enemigo.
Los mohos son hongos y crecen rapidamente en las condiciones adecuadas: el moho se reproduce con tan solo algo de humedad y una temperatura determinada. A medida que maduran los diminutos hongos, florecen y arrojan millones de esporas microscópicas al aire. El moho florece en espacios húmedos y cálidos, con poca iluminación o donde no hay circulación del aire: armarios, sótanos, cajas, en el maletero del automóvil, y en general en todo espacio cerrado. El moho se reproduce a través de esporas que pueden estar latentes durante años hasta que se crean las condiciones necesarias para que germinen y se crea una colonia. Estas condiciones son: un nivel de oxígeno y temperatura correctos y una humedad alta.
Crecen en productos de celulosa y proteínas, tales como algodón, lino, madera , papel, seda, cuero y lana. Además del olor a rancio desagradable, el moho puede causar daños considerables si se permite que crezca.
La prevención es la mejor política para el moho en prendas de cuero y enceradas. Si a estos artículos se les da un buen mantenimiento y son conservados en lugares bien ventilados y secos, las probabilidades de sufrir un ataque de moho se reducen en gran medida.
El moho es, junto con los ácaros del polvo y las partículas procedentes de los animales domésticos, uno de los biogénicos con más prevalencia en los interiores de nuestros hogares y normalmente pasa desapercibido o es invisible hasta que ya ha afectado a una gran zona. Por este motivo es importante eliminarlo y sobre todo tomar las medidas necesarias para prevenir su aparición.
Al confiar en profesionales de la limpieza y el encerado de ropa (
www.enceradoropa.com), sus prendas más queridas (
barbours, belstaff, hackets y similares), durarán más y lo harán en las mejores condiciones. Ese fuerte olor a rancio es en muchas ocasiones una consecuencia de la mala conservación de este tipo de prendas.
PREVENCIÓN
Mantenga los artículos limpios de sudor, sangre, aceites y otros fluidos corporales que puedan suministrar suficiente alimento para que el moho empiece a crecer. Incluso las sustancias comunes tales como bebidas alcohólicas, refrescos y zumos, y lociones corporales pueden dañar la ropa de cuero y las prendas enceradas. Las prendas se han de secar completamente en un área bien ventilada antes de guardarla.
ALMACENAMIENTO
El cuero es poroso y necesita respirar. Resulta conveniente guardar su piel en un lugar ventilado y seco, que no esté demasiado caliente o frío, y sin humedad. No se debe obstaculizar la circulación del aire cargando de ropa excesivamente el armario. Una estancia poco ventilada y con un grado alto de humedad o de condensación –como pasa en los sótanos- o una superficie adecuada (ropa, madera, comida, cuero, yeso, etc.) que se encuentre mojada durante al menos 24 o 48 horas es el mejor sitio para que el moho pueda crecer. Mantener la humedad por debajo del 60% es una de las principales maneras de dificultar la proliferación de moho, ya que sin humedad no hay moho.
No guarde sus prendas enceradas y de cuero en contacto directo con el flujo de salidas de calefacción o cerca de las unidades de calefacción ,y evite la luz solar directa. Use perchas adecuadas para ayudar a mantener la forma de su ropa de cuero y si emplea fundas, que sean de un material transpirable como la tela de algodón. Evitar el almacenamiento de este tipo de ropa en bolsas de plástico, envases de plástico, cajones apretados, cuartos de baño etc.
ELIMINACIÓN DE HONGOS Y MOHO
El moho puede atacar incluso con una limpieza y almacenamiento adecuado.
Debe secar las prendas enceradas y de cuero al sol y así aprovechar las propiedades desinfectantes de la luz ultravioleta.
(Recomendación: Haz esto en un día con viento, ya que así evitamos algo de tiempo en la exposición de la ropa a la luz del sol. En prendas de cuero es imprescindible acortar el tiempo de exposición al sol.)
- Ventilación: Ventilar a conciencia la vivienda para evitar bolsas de humedad o condensación.
- Luz solar: El moho no puede vivir recibiendo luz solar, por lo que siempre que sea posible hay que procurar que nuestra vivienda reciba el máximo de sol posible. La luz del sol es un antiséptico natural y matará el moho.
- Pinturas anti-moho: Utilizar pinturas antimoho en las paredes susceptibles o ya afectadas por moho. Los fungicidas son sustancias muy tóxicas y deben ser tratados con cuidado, por lo que siempre que sea posible hay que optar por sustancias que sean seguras para la eliminación del moho.
- Limpieza zonas húmedas: Limpiar las estancias húmedas de la casa, como lavabos y cocina, con productos que eliminen el moho que no sean tóxicos, como el bicarbonato, el percarbonato sódico o el agua oxigenada.
- Ropa de cuero y prendas de vestir: Mantener la ropa seca, ya sea acabada de lavar, ropa que hemos utilizado para hacer deporte, ropa húmeda por la lluvia o toallas usadas. Si tendemos la ropa dentro de casa, utilizar un deshumidificador eléctrico para secarla.
- Calzado: La ropa se lava a menudo pero los zapatos no, por lo que es una buena costumbre dejar los zapatos en la entrada de la casa para evitar traer más esporas a la vivienda. Además se deben guardar los zapatos que no utilicemos en lugares ventilados después de haberlos limpiado.
REPARACIÓN DE PRENDAS ENCERADAS Y DE CUERO
Después de la eliminación del moho y los hongos, se tendrán que reacondicionar sus prendas enceradas y de cuero. Además de ese pequeño gran enemigo, también hemos eliminado los aceites naturales que impregnan y mantienen el cuero en buenas condiciones, así como las ceras y grasas de la prendas enceradas.
Para mejores resultados lleve sus prendas enceradas (
barbour, belstaff, hackett, etc), engrasadas y de cuero, afectadas por el moho a establecimientos profesionales (
www.enceradoropa.com), y que sean capaces de limpiar y conservar sus prendas con la mejor calidad y profesionalidad posible, y así evitar el deterioro, y la perdida de propiedades en prendas que las estimamos, y han supuesto una fuerte inversión económica.
Nuestro servicio consiste en una higienización, una limpieza, y un reencerado. Con el proceso de higienización, conseguimos que las prendas queden libres de patógenos y olores, con la limpieza eliminamos aquellos restos de cera dañada y suciedad. El reencerado devuelve a la prenda sus propiedades aislantes e impermeables. Si fuese necesario reponer el color a la prenda, lo haríamos con nuestras ceras reparadoras de color.